El aprendizaje dinámico a través de canciones y dibujos es perfecto para que los más pequeños aprendan inglés.

Más del 90% de los niños y niñas españoles practican el inglés en casa, un 26% lo hace a diario y la mayoría al menos cuatro días a la semana, según datos revelados por un estudio elaborado por la Universidad de Cambridge, que destaca la voluntad de los padres españoles para que sus hijos puedan aprender inglés sin las dificultades que ellos sufrieron.

Para los investigadores, la clave del éxito del aprendizaje en niños pequeños es el vínculo emocional que desarrollan con las personas con las que aprenden y su curiosidad innata. El aprendizaje dinámico a través de canciones y dibujos es perfecto para los más pequeños, por lo que los profesionales recomiendan una serie de fórmulas para que los niños disfruten aprendiendo otro idioma:

Póster de rutinas: a los niños les encanta la rutina y hacer las cosas una y otra vez. Saber lo que se espera de ellos en cada momento les ayuda a definir los tiempos de estudio del inglés. Un póster con rutinas, acompañado de dibujos y con objetivos a alcanzar será perfecto.

Canciones con acciones: las canciones son excelentes para el aprendizaje de otro idioma, ya que ofrecen la posibilidad de repetir y funcionan como modelo de pronunciación para el desarrollo del oído. Si la música aparece en vídeos donde los niños tienen que realizar acciones a modo de juego, los resultados serán todavía mejores.

YouTube como fuente de recursos: en esta plataforma podemos encontrar miles de recursos adaptados a cada edad. Los más mayores pueden elegir contenidos subtitulados que ayudan a reforzar las habilidades escritas. Media hora al día de vídeos en inglés puede suponer un gran avance.

Cuentos como aliados: las historias nos ayudan a transmitir conocimientos y valores, al tiempo que despiertan la imaginación y potencian el gusto por la lectura. Si además estos cuentos están en inglés, los niños aprenden el idioma divirtiéndose, casi sin darse cuenta.

Juegos interactivos de vocabulario: ofrecen a los niños la posibilidad de escuchar la pronunciación adecuada y repetir las estructuras, por lo que el lenguaje se va consolidando de manera gradual, al tiempo que los pequeños se divierten.